SFXE vende Tomorrowland a Disney, sin dejar muy claro los términos del acuerdo o como va a afectar la venta a los distintos festivales
Como te venimos contando desde hace tiempo, la propietaria de Tomorrowland entre otras muchas marcas de festivales de electrónica, SFX Entertainement, lleva tiempo en la cuerda floja, con los últimos meses en un estado constante de quiebra inminente.
Tras varios rumores de compra, entre los que destacaban la potente promotora Live Nation, el promotor holandés Jhon de Mol o más recientemente, aunque parecía poco probable, la poderosa Disney.
Pues finalmente parece que esta última se ha hecho con los derechos del que posiblemente sea el más famoso festival de electrónica del planeta, si bien no queda claro en el comunicado emitido por la propia Disney, si ha adquirido solo los derechos para Norteamérica o los de toda la franquicia.
“Hoy podemos anunciar el acuerdo con SFXE por la compra de los derechos de la marca Tomorrowland por los que llevamos tiempo negociando. Los potentes planes que tenemos para la marca serán desvelados en la segunda quincena de enero”
Disney, que ya tuvo un enfrentamiento legal por el nombre Tomorrowland en Norteamérica, que terminó obligando al cambio de nombre por TomorrowWorld en el evento a celebrar en USA, no aclara demasiado sobre el alcance del acuerdo, dejando más preguntas que respuestas sobre el futuro del festival, sobre todo en su evento TomorrowWorld, que tantos problemas acumuló en su última edición celebrada, tal como te contamos aquí.
Además esta venta arroja también muchas dudas sobre el futuro de SFXE, que al vender el que sin duda era su principal activo, tendrá que enfrentarse ahora a los mercados que tantas pérdidas le han ocasionado, y que le han llevado a esta ruinosa situación, tal como te contamos aquí. Además Sillerman tendrá que dar muchas explicaciones a sus accionistas, que en todo momento se han mostrado reacios a la venta de activos estratégicos.
Veremos que sucede en los próximos días.
ACTUALIZACIÓN
Esta ha sido nuestra pequeña broma por el día de los inocentes.