Hace poco mas de una semana estuvimos en Awakenings Festival y os contamos que tal nos fue en el mejor festival de techno del mundo
Amsterdam nos recibió con un clima primaveral, perfecto para visitar sus canales unos días antes de que comenzará lo que para nosotros fue una experiencia increíble, en el mejor festival de techno del mundo.
Llegó el sábado y nos pusimos camino a la estación de Sloterdijk (estación en la que este redactor jura haberse cruzado con Marcel Dettmann), lugar desde donde la organización de Awakenings tenía designado como punto de partida para los autobuses habilitados para llegar al festival, donde ya se respiraba un ambiente de fiesta y donde pudimos ver muchas banderas españolas. Después de tomarnos unos refrescos y conversar con algunos compatriotas, en menos de 1 minuto ya estábamos montados en uno de esos muchos y bien organizados autobuses que la organización de Awakenings tenía habilitados para llegar con facilidad a Spaarnwoude.
Al bajar del bus a eso de las 14:00, y tras caminar entre árboles a una temperatura perfecta, nos recibía el maravilloso sonido del trío francés Apollonia. Los franceses nos encandilaron con su hipnótico underground, con sus espectaculares y cuidados sonidos, y llegamos a la conclusión de que, sin duda, son el futuro del techno francés.
Llevábamos poco mas de una hora en Awakenings y ya nos íbamos dando cuenta de que no es un festival cualquiera, solo viendo los espectaculares escenarios y escuchando el maravilloso sonido que salía de cualquier altavoz del festival.
Nos fuimos a ver un rato del live del dúo The Advent & Industrialyzer. Para nosotros fue un gran descubrimiento ya que nunca habíamos asistido a una de sus actuaciones, y la primera nos encantó. Del ritmo tranquilo de Apollonia en el espectacular Area W, le dimos un fuerte subidón a los BPM y nos activamos con el set en live de los portugueses.
Después de este cambio de ritmo necesitábamos un pequeño descanso, pero cuando estábamos de camino a un pequeño lago que hay dentro del festival, Ricardo Villalobos nos atrapó sorprendentemente. Y decimos sorprendentemente porque para nosotros no era uno de los principales atractivos del festival. Sin embargo, esta vez el chileno se lució, lo dio todo en el escenario y nos cautivó con una sesión a vinilos que calificaremos, a riesgo de ser criticados, como una de las 3 mejores sesiones del festival. Cerró su set Villalobos y en el mismo escenario era el turno de Loco Dice. Disfrutamos de una muy buena sesión, en la línea del alemán, mientras nos pasaban por encima gigantescos aviones camino de el aeropuerto de Schipol. Fue un rato en el que nos divertimos muchísimo, incluso pusimos a vuestra disposición en redes sociales, vídeos del momento para que pudierais disfrutarlo con nosotros.
Nos movimos de escenario para ver a uno de nuestros dúos favoritos del techno mundial y que no nos cansamos de ver, Pan-Pot. Veíamos por primera vez el enorme escenario Area V, un escenario en el que se respiraba un ambientazo espectacular, acompañado del inconfundible sonido Pan-Pot, que como siempre, nos dejó muy satisfechos.
La carpa Area X fue el lugar en el que decidimos terminar el primer día de festival. El italiano Joseph Capriati nos esperaba en esta carpa con un despliegue de luces brutal. Sin palabras nos dejó Capriati con la que vamos a calificar como la mejor sesión del primer día. Un techno oscuro pero rítmico, contundente pero con clase, en definitiva, un autentico sesionón que convirtió a Joseph Capriati en el protagonista del primer día de Awakenings Festival.
Después del sensacional primer día y quedar boquiabiertos con el cierre de Capriati, estábamos ansiosos por empezar el segundo. Comenzamos este segundo día en el mismo escenario en el que terminamos el primero. Nina Kraviz & Exos nos dieron un buen recibimiento con un gran set, que precedería a la sesión de Dave Clarke & Dj Bone, sesión de la que solo vimos el fabuloso principio.
Nos fuimos a comprar algunos recuerdos a uno de los numerosos stands repartidos por todo el festival. Como tardamos un poco mas de la cuenta, dolorosamente nos perdimos alguna actuación interesante, pero curamos el dolor con la actuación de uno de nuestros representantes en Awakenings, Paco Osuna. Disfrutamos por primera vez en el escenario Area B, un escenario bastante bonito, escondido entre arboles, situado en un emplazamiento idílico, que nos hizo aislarnos del resto del festival por un rato. Pudimos intuir que Paco Osuna se sentía como en casa, ya que el prado en el que estaba el Area B, estaba plagado de banderas españolas. Esta comodidad que suponemos sintió Osuna, se plasmó en los platos. Paco Osuna entregó lo mejor de sí mismo elaborando una de las mejores sesiones que hemos podido ver en directo del icono del techno español, y que enloqueció a todo el público allí congregado.
Nos fuimos a disfrutar un rato de la elegancia de Joris Voorn, que durante un rato nos hizo volar en el Area C. Había mucha calidad para terminar el festival y, como no eramos capaces de decidirnos por ningún artista en concreto, decidimos ir haciendo un pequeño tour por los escenarios para disfrutar un poco de cada cierre. Empezamos esta ruta en el Area V con Adam Beyer, uno de los artistas que mas ganas teníamos de ver y que, por supuesto, creó un ambiente mágico al que ya nos tiene acostumbrados. Fuimos en la busca de Speedy J, ya que es un artista difícil de disfrutar por tierras españolas, y efectivamente fue una pasada. Speedy J, con techno en su más pura expresión, a un ritmo frenético, convirtió el Area Z en un lugar de auténtico infarto. Casi sin querer cerramos el festival en el Area W con Joseph Capriati de nuevo a los mandos. y ¿Qué más podemos decir del italiano?. Otra vez prodigioso, el italiano cerró el festival en este escenario futurista, entre fuegos artificiales y dejando la sensación de que ha dado un paso más en su carrera, convirtiéndose en el protagonista, y saliendo por la puerta grande del mejor festival de techno a nivel mundial. Nos sentimos unos privilegiados de haber vivido en primera persona este paso de gigante en la carrera del italiano.
En conclusión, un festival impresionante en todos los aspectos. Una organización de 10, un emplazamiento fabuloso, un ambiente maravilloso, un sonido y unos escenarios a los que pocos festivales en el mundo pueden hacer sombra, hicieron que, ya incluso desde el tren de vuelta a nuestro hotel, nos planteemos volver el año que viene.
Por cierto y para terminar, ¡Ya hay aftermovie!
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