Si sois productores y djs seguramente os sintáis identificados con alguna de las situaciones que vamos a nombrar
En todos los oficios hay situaciones comunes y muchas veces divertidas que se producen entre todos los profesionales que se dedican a el.
Los mecánicos suelen perder la llave 10-11, los informáticos no pueden vivir sin formatear y los comerciales se inventan ofertas sobre la marcha cuando olvidan el catalogo de sus productos en el coche. Los productores y djs también tienen sus anécdotas y situaciones comunes. Nombraremos algunas que, si te dedicas a este maravilloso mundo de la creación o mezcla de música electrónica, seguramente hayas vivido algunas vez.
Comenzamos con la elección del DAW con el que producir. Siempre está el típico entendido que aparece como el demonio en tu hombro para decirte que FL Studio es un juego para niños, Ay… pobre de el… Si supiera la cantidad de megahits que han salido a través de este programa… Este individuo suele ser el mismo que sin haber tocado Ableton Live te recomienda que uses Reason, consigues instalar uno en tu pc y cuando lo abres te surge la duda de si aprender a usarlo o mejor estudiar física cuántica en la universidad de Harvard.
Esta va para los djs. ¿Cuantas veces has estado pinchando con unos Cdj 200 (por poner un ejemplo) con aproximadamente 150 años, que patinan como Michele Kwan en un campeonato del mundo y se te acerca un “purista” para decirte: “para mi si no es a vinilo no es pinchar”?. Ponte aquí amigo mio, súbete tu a la cabina e intenta domar a estas dos yeguas descontroladas, ya después me cuentas.
Seguimos con la producción. Seguramente hayáis pasado hora y horas y mas horas buscando ese kick con el que convencer al mismísimo Cristian Varela. Y posiblemente también tengáis ese amigo productor que llega a tu casa y consigue en 15 minutos lo que tu nos has conseguido en 15 días, pero no con un bombo nuevo, no, con un bombo que ya habías probado 15.000 veces pero como lo pone tu amigo suena brutal, como si Ableton incorporara un lector de retina y le diera a tu amigo todo el cariño que a ti no te ha dado.
Esto si que nos ha pasado a todos los productores. Son las 23:45, después de varias horas en tu silla comienzas a moverte como un loco con un track que acabas de crear, te vienes arriba de tal manera que te acuestas pensando en el correo electrónico que le vas a mandar a Drumcode con el demo de tu super track. Sale el Sol, te levantas y… ¿que ha pasado aquí? Este no es mi tema, ¡MAMA! ¿donde has puesto mi tema?, en su sitio responde tu madre. Es como si el gato hubiera aprendido a usar tu DAW durante todas esas horas que, ahora sospechosamente, ha pasado acostado acostado detrás tuya mientras producías y se hubiera grabado maullando durante toda la noche.
Día D, hora X y tu pinchando un techno mas digno de Dekmantel que de ese sótano lleno de cajas en el que te toca actuar esa noche. Se acerca una chica o chico con una vestimenta poco adecuada para bailar techno y te dice: es el cumpleaños de mi amiga o amigo, ¿puedes poner cumpleaños feliz?. Que digo yo, cumpleaños feliz… ¿de Richie Hawtin o de Maceo Plex?. Querida amiga o querido amigo oyente, si hubieras estado solo 10 minutos escuchando la música del dj, no hubiera sido difícil intuir que ese muchacho no lleva “cumpleaños feliz”, es mas, hubiera preferido que fueras la segunda persona en preguntarle que si puede poner “nuevas tendencias” sin especificarle mucho mas.
Y por último, la opinión de tu hermano y de tu novia. Consigues rehacer ese track que hace 3 días le ibas a mandar a Drumcode y diciéndote a ti mismo “esta vez si, esta vez si”, abres la puerta de tu estudio casero con la intención de que tu hermano te coja en hombros para llevarte directamente al Area V de Awakenings. Pero, como casi siempre, la realidad no es lo que esperabas y su cara de poker te hace darte cuenta de que necesitas trabajarlo mas, pero siempre usas la frase “tu no entiendes de música”. La situación con la novia es distinta, ella tiene la misma cara de poker pero intenta sonreír para no desanimarte, aunque notas que es la misma sonrisa que Sheldon Cooper intenta forzar en uno de los capítulos de The Big Ban Theory.
Productores y djs solo deciros que si os sentís identificados con algunas de estas situaciones vais por buen camino, es el proceso natural de la formación de un profesional de la música electrónica. Y sobre todo recordad que la opinión que mas debe contar es la vuestra propia ya que esa música, sea mejor o peor, ha salido dentro de vosotros.