Un paraje de ensueño con un cartel inmejorable que sucumbió a nuestros encantos; Steve Angello, Dj Snake, Loco Dice o Tchami, los grandes triunfadores
27 de Mayo, viernes. Ya estábamos todo el séquito de españoles en Londres. Como el pasado año, decidimos tomar unas cervezas por los alrededores de la zona, pero poca cosa; los festivales ingleses son durante el día y había que aprovechar la jornada al máximo. Tras unas pintas, nos fuimos a descansar pasada la media noche, a sabiendas que debíamos estar listos antes de las 10 am para iniciar el largo camino hasta Upminster.
Y así fue. Comenzaba la aventura festivalera desde el barrio de Kilburn. Un recorrido de una hora y 40 minutos. Lo que tardó el overground en dejarnos en la famosa parada de Barking, a escasos kilómetros del destino final. Una vez allí, ya se respiraba el ambiente de un festival. Los jóvenes, y no tan jóvenes, se pasean por la vigilada última estación de la Distric Line, Upminster; gran abundancia de policías pero sin altercados aparentes. Como no, los primeros jóvenes en encontrarnos: españoles. Alrededor de las doce de la mañana estábamos situados a las puertas de los autobuses que te acercaban al festival, sin aparente revuelo. Nos bebimos unas cervezas antes de entrar, ritual mañanero por tierras inglesas en un día de estas características, y nos fuimos camino del recinto.
Un camino de 20 minutos en el que el conductor tuvo que tirar de experiencia para sortear en más de una ocasión a
los valientes que se iban andando desde la propia estación; estimo que las dos horas y media a paso ligero no se las quita nadie. Pero por fin llegamos al festival. Un día en el que, tal y como predecía BBC Weather, reinaría el sol, el cual no vimos hasta pasada unas horas.
Nos bajamos del autobús, sin dejarte dar un paso en ese agradable césped del entorno campestre, los reventas intentan hacer su agosto con entradas a las puertas del recinto. Se pueden divisar miles de personas en un camino que recorre unos 500 metros, hasta que se divide entre Regular tickets y VIP tickets; nosotros tuvimos que ir por esta último por motivos de prensa. Pero quién lo diría. Las nuevas tecnologías en un festival a la última se volvieron en nuestra contra. Los lectores de QR no leían los tickets en el móvil, por lo que tuvimos que acudir a unas taquillas que nos retrasó la entrada más de lo esperado. Un pequeño percance sin más.
Tras un leve registro y la visita de un perro, figura obligada en cualquier evento de este tipo en Reino Unido, ¡ya estamos dentro del festival!. Lo primero es acudir a la zona de prensa, en la otra esquina del recinto, pero bastante equipada y acogedora. El sol ya acompaña y hablamos con Carina, Jefa de prensa de la promotora del evento, que nos comenta cuales son los pasos a seguir, privilegios, accesos y funciones. Una vez terminado el proceso diplomático, procedemos a conocer las entrañas del festival.
La primera parada la hacemos en USED + ABUSED, para esperar al más esperado por los amantes del techno. Loco Dice. Es su carpa. Es su fiesta. Todo está preparado para su actuación. Los rombos se divisan desde en su transparencia y la carpa se empieza a llenar. Pero hacemos un alto en el camino y nos mudamos a la famosa UKF. Muchas esperanzas puestas en esta carpa. Y la primera actuación ya nos sorprende gratamente. Ellos son Cause & Effect, con un house-bass muy pegadizo y algunas caídas de trap que provocan el delirio en la acalorada carpa blanca. Nos mudamos a donde estábamos anteriormente, para, ahora sí, asistir a la actuación de Loco Dice en la que vibramos, bailamos, lucimos y contorneamos con las miles de personas allí presentes. Una sesión que dejamos a la mitad para poder conocer el resto del festival, sus parajes, encanto y los numerosos rincones para observar que tiene el recinto.
No falta, por supuesto, la foto de rigor en las letras que presiden el recinto de Upminster. En ellas, situadas a la entrada, todos los jóvenes se suben y rodean el vistoso monumento para inmortalizar una foto que quedará para el recuerdo en las redes sociales de todos ellos. Decidimos pues, acceder a la zona vip, desde la que se observa una XCLSV área. Un lugar lleno de lujo y comodidades. La zona VIP, amplia pero con abundantes asistentes, cuenta con un escenario exclusivo para la zona y se puede disfrutar de un ambiente más relajado.
Pero hemos venido a bailar y disfrutar por lo que volvemos a la carpa de UKF para disfrutar del cabeza de cartel del día: SHY FX. Se notaba que el famoso productor -componente junto Chase & Status del grupo Rebel Sound- estaba ya actuando. La carpa tuvo que ser acotada por los vigilantes de seguridad por exceso de aforo, algo jamás visto anteriormente. Cierto es que estábamos ante la más pequeña de todas.
Un ambiente enrarecido y un calor sofocante nos hizo tomar la decisión de mudarnos al escenario principal; poco pudimos disfrutar de SHY FX. Allí nos esperaban cuatro platos fuertes del día. Claptone, SIGMA, Dj fresh y Fatboy Slim, por ese orden, actuaban desde las 6:30 pm hasta el cierre de la jornada. Así es, nos las prometíamos muy felices.
El primero de ellos fue Claptone, que ya actuaba cuando llegamos al escenario principal. Un Main que dejaba con la
boca abierta conforme te lo encontrabas de frente. Hombre de guante blanco y pico dorado y con un techno bajo el sol londinense que brillaba sobre las cabezas de los miles de festivaleros que se daban cita en el escenario principal. Llegaba la hora de SIGMA. Uno de los grupos con más tirón en Reino Unido. En esta ocasión, actuarían en formado Dj set, pero aún así, no se echaron en falta sus clásicos como ‘Nobody to Love‘, ‘Coming Home‘ o ‘Rudeboy‘.
Tras poner patas arriba el main stage. Se producía un cambio tercio. El siempre espectacular Dj Fresh hacía de las suyas durante un set en el que no faltó electro, trap y algunos clásicos que terminaron de enganchar a todos los asistentes. De esta manera se abarrotaba el aforo a la espera del plato fuerte de la jornada: Fatboy Slim. El londinense jugaba en casa y estaba claro que iba a darlo todo en su gran noche. No faltó su eterna y brutal apertura con ‘Eat Sleep Rave Repeat’, unido a sus majestuosos visuales que daban un colorido espectacular en el sunset time.
Llegado el momento, y tras varios minutos enfrente del gran ídolo, decidimos mudarnos a la carpa de UKF, donde nos esperaba Dimension. Todos estábamos de acuerdo en que era uno de los que más ganas teníamos de ver ene sta primera jornada. Cuál fue nuestra sorpresa al llegar, que a lo lejos ya leíamos el nombre de Friction. Así es, el joven británico ya había actuado por algún motivo (probablemente la ausencia de algún artista adelantaría su actuación). Pero la decepción duró poco. Y es que Friction no se dejó nada en el repertorio. Pudimos disfrutar de una sesión de drum and bass como hacía tiempo que no escuchábamos; con temas míticos, que todo el mundo se sabía y que provocó la locura en el cierre final a una primera jornada para enmarcar.
Con ese buen sabor de boca nos volvíamos a casa, a descansar lo máximo posible, que nunca es suficiente, porque a la mañana siguiente volvíamos a la este londinense.
Eran la 1:00 pm y ya estábamos en la cola del autobús, la cual pasamos sin ningún tipo de espera el día anterior, pero que nos costó más de hora y media el domingo. Ya se hacía notar la masiva asistencia. Y así se confirmo cuando entramos en el recinto. No se puede decir que doblegara en el número de personas al día anterior, pero el aumento en miles de asistentes era considerables.
Un calor sofocante acechaba el recinto a esa hora (4.00 pm), lo que nos obligó a no despegarnos de la botella de agua en casi toda la tarde. Tras una parada obligatoria en boxes, fuimos a ver un artista del que guardábamos un especial recuerdo de la pasada edición: SPY. Dj residente de Hospitality y que ya tenía la carpa casi llena con un gran número amantes del sello a una hora temprana. No defraudó, para nada, pero nuestro cansancio aún hacía mella y no pudimos disfrutar al 100% de una gran sesión. Y llegó la hora de Camo & Krooked, artistas a los que aún no habíamos conseguido ver al completo en un festival por coincidencias u horarios.
Ni que decir tiene que el número de festivaleros aumentó considerablemente con la llegada del B2B. Una sesión muy parecida a la que llevaron a cabo en el festival Rampage, al que también asistimos en Bélgica, que unido al espectáculo de un MC a la altura de las circunstancias, pudimos disfrutar de uno de los mejores set del momento. Había que reponer fuerzas, el cansancio hacía mella y nos quedaban 5 largas horas de las más movidas. Por lo que decidimos ir a la zona de prensa para comer y beber algo que nos diera fuerzas para el spring final.
Tras una hora de idas y venidas nos plantamos en el escenario principal, esta vez desde la zona VIP, donde las vistas eran sencillamente impresionantes.
Desde allí presenciamos la apertura de Tchami. No eran pocas las expectativas puestas en este artistas. Un sesión que brilló con su house-bass característico y en el que no se dejó nada en el tintero, incluido su famoso ‘Lean On‘ remix a Major Lazer. Y así, durante una hora. Bajo un sol que acompañaba en casi toda la jornada y, para que negarlo, con Tchami a los mando es un gustazo con esa conjugación.
Llegaba entonces, para mí, el artista más esperado del fin de semana y al que más ganas tenía de ver. Su mezcla de trap, house y dubstep le convierte en uno de los djs más completos en cuanto a los estilos que se encuentran en auge ahora mismo se refiere. Dj Snake llenaba el main stage desde el minuto uno. Como siempre, chulería y descaro durante toda su actuación en la que pudimos disfrutar de temas con el sello de Zomboy, Skrillex, Major Lazer y sus producciones más famosas; nunca faltan en sus set. Rodeado en todo momento de cámaras de fotos en el escenario y con un desparpajo que solo él sabe llevar de esa manera, la gente pudo disfrutar de una sesión llena de ritmo y locura. Mago a los platos, líder con el micrófono y manejo total de las masas que calentaron motores para la última puesta de largo.
Ahora sí. Media hora de preparación en el escenario, enormes torres de luces y un cambio radical para recibirlo a él. El encargado de cerrar el festival un año más; lo desvelaremos más adelante porque la espera se hacía tan larga y elenco era tan lujoso que tuvimos que dar el salto al Hospitality stage. Allí actuaba en ese momento Sub Focus (special guest). Como buenos amantes del drum and bass, era complicado que nos saltáramos a este pedazo de artista, pero lo que habíamos dejado atrás merecía la pena.
Steve Angello abarrotaba el recinto de Upminster. El sueco entraba en escena con un espectacular escenario en el que lucía fuegos artificiales a cada minuto. La brillante puesta en escena, la multitud era brutal y la calidad, indiscutible, del productor hacían de este momento uno de los recuerdos imborrables en la memoria de los allí presentes. Temas cono ‘Opus‘, junto a ‘Show Me Love‘, ‘Reload‘ o los míticos de Swedish House Mafia, no faltaron durante la hora y media que estuvo encima del escenario.
Acababa así un fin de semana de ensueño. Un festival que nos trató de maravilla, que acompañó en todos los aspectos posibles, con un cartel y una puesta en escena única que te teletransportaba a un mundo mágico en el que solo cabe la felicidad como estado y al que, sin duda, volveremos el año que viene con las pilas cargadas. Nos vemos en We Are FSTVL 2017.
