El pasado sábado la capital abrió sus puertas para recibir uno de los eventos más famosos de la música electrónica, Sensation Rise tiñó Madrid de blanco de nuevo.
Llevábamos desde mayo, mes en el que Sensation Rise anunciaba fecha en España, con la miel en los labios. Casi seis meses después, hemos podido saborear la música de una manera distinta, una fiesta donde la experiencia va más allá y la verdad es que no defraudó. A las ocho de la tarde IFEMA daba por inagurado el evento y este no tardaría mucho en coger color. La música empezaba a sonar, por parte de los primeros DJs, entre los que había representación nacional, de la mano de Jose AM y Abel Ramos X Albert Neve, estos últimos se encargaban de cerrar estas sesiones de calentamiento dejando muy buenas vibraciones. El maestro de ceremonías, la voz del evento, la ponia MC Gee, tratando de animar en todo momento.
Estaba todo listo para que la más pura esencia de Sensation se desatará. El escenario, como no podía ser de otro modo, estaba a la altura de las circustancias, mostrándose imponente y vistoso a los ojos de cualquiera. A pesar de que no se situaba en el centro de la pista, como suele ser común en este evento, su colocación seguía permitiendo una experiencia de 360º. Los efectos luminosos y las posibilades que este permitía quedaron evidentes durante el espectacular Opening Show, que servía como anuncio de lo que quedaba por venir. Una vez acabado el espectáculo intercalando luces, fuegos y fuentes de agua, la cara más representativa de Sensation, Mr White, se ponía a los mandos, impregnando estilo, clase y sobre todo buena música. No tardó en conquistar al público, que ya abarrotaba la pista de baile desde hacia rato y que venía con ganas de disfrutar esta vivencia al máximo. El mejor groove house se hacia hueco, llegaba Kryder y con su experiencia, una personalidad potente y buen hacer sobre los platos, continuó la fiesta, subiendo incluso el nivel. Un artista que sabe de sobra lo que es pasarlo bien en territorio español y demostró una vez más porque es uno de los favoritos.
Tras la actuación del británico, llegaba el turno del que fue el primer confirmado de Sensation en España, el mítico Fedde Le Grand. Es cierto que el neerlandés pinchó determinados clásicos que evidentemente surgieron efecto positivo sobre los asistentes. Pero por otro lado, este set terminaría por ser cansino, el artista no se movió de su estilo más caracaterístico que está algo obsoleto hoy en día y a final estos sonidos daban la sensación de ser demasiado repetitivos y mermantes. Los chicos de W&W cogían el relevo, con la misión de dejar a los espectadores en lo más alto, preparados para un cierre épico. La pareja de DJs se coronó con una actuación soberbia, moviéndose a su antojo ente el EDM, algo de trance e inclusos sonidos más duros. Esto causó furor y consiguió el objetivo, poniendo la grada patas arriba.
Todo lo bueno llega a su fin, pero antes había que disfrutar del postre, con sabor holandés en este caso. Nicky Romero, ponía el broche a una noche dorada y lo hacía dejando claro que sigue siendo uno de los mejores de la escena. Un set algo atípico, tirando por canciones más instrumentales, aunque no faltaron algunos de sus tracks más característicos. Estaba siendo un cierre magnífico e IFEMA acabó de venirse abajo cuando “I Could Be The One”, el tema que comparte Nicky Romero con Avicii, sonaba por los altavoces. Finalmente, guiada por la euforía del ambiente, la actuación se alargó algo más de lo esperado, terminando con la voz de Cold Play en “Viva La Vida” y poniendo el punto y final con “One more Time”, mítico hit de Daft Punk, llenando de color a una audiencia que empezó siendo un folio en blanco.
Sensation Rise cerraba su tour de 2018 en Madrid y fue maravilloso. La capital y su gente demostraron que están preparados para albergar eventos de este calibre, que la escena española sabe apreciar la música electrónica y todo lo que conlleva una fiesta así. La experiencia Sensation es un deber para todo amante de estos sonidos y hacerlo en nuestro país fue todo un placer.