Si tienes pensado acudir a Creamfields (UK) aquí encontrarás algunos consejos y recuerdos de nuestro paso por la edición de 2019
Creamfields es uno de los mayores festivales de toda Europa, y cada año marca la diferencia con su espectacular line up. Sea cual sea tu género favorito dentro de la música electrónica, hay un escenario hecho a medida para ti. Así que, si has tomado la decisión de acudir a este increíble evento y andas un poco perdido/a porque no sabes qué te vas a encontrar, aquí tienes algunos consejos.
Organízate. El recinto donde se celebra el festival es bastante grande y cuenta con más de 10 escenarios. Habrá muchos artistas que no querrás perderte, por lo que te recomendamos que compres los horarios y el mapa el primer día antes de entrar al recinto. Este festival no anuncia los horarios con antelación, por lo que no sabrás si coinciden artistas que quieras ver hasta que llegues allí. El personal del festival los vende a 8£ y te servirán de gran ayuda para saber dónde y cuándo ver a tus DJ favoritos.
Lleva calzado cómodo. Está claro que vas a un festival de muchas horas y no vas a parar de andar y bailar pero, además, el terreno de la zona sobre el que se construye el festival está inclinado. Vas a encontrarte más de una cuesta antes de llegar a la entrada, y una vez dentro, incluso en las carpas, más de lo mismo. Si tienes suerte y el tiempo acompaña no tendrás que preocuparte por nada más, pero si llueve o el ambiente es húmedo, el suelo se reblandence y se llena de barro, sobre todo en los accesos y en los baños. Llévate un par de zapatillas de repuesto en el caso de que se te manchen y no tengas tiempo para limpiarlas. En muchos foros, asistentes veteranos recomiendan llevar botas de agua. En nuestro caso, al estar a más de 30ºC, no nos hicieron falta. Por otro lado, al no haber papeleras en las que depositar la basura, el suelo se llena de vasos, botellas, latas de cerveza, comida, paquetes de tabaco… Cosa que también dificulta caminar con comodidad por el recinto.
Aprovecha la experiencia al máximo. Creamfields ofrece actuaciones muy exclusivas que son muy difíciles de ver en otros eventos. Este año pudimos ver a Eric Prydz en Steel Yard aprovechando al máximo la estructura del escenario con su show VOID, mientras en el escenario principal deadmau5 nos dejaba la boca abierta con el Cube v3. Si te ocurre como a nosotros y coinciden dos artistas como estos, intenta ver un poco de ambos, no te arrepentirás. Piensa que ya has llegado hasta allí y estás a punto de vivir en directo actuaciones únicas.
Lleva tu propia botella de agua. El festival cuenta con puntos de agua en los que podrás rellenar tu botella, previamente vaciada en los controles de seguridad. Si se te olvida, siempre puedes comprar una dentro por 2.5£ y rellenarla cuantas veces quieras (o puedas) a lo largo del festival. Ármate de paciencia porque las colas en las fuentes suelen ser bastante largas, a no ser que haya un headliner en alguno de los escenarios más grandes y la gente despeje esa zona. Hemos leído por redes sociales a asistentes que denuncian la falta de agua en puestos de comida el último día, así que si no quieres pasar sed, trae tu botella de casa.
Espera lo inesperado. Sin duda, Creamfields va a ser un festival que te va a sorprender sí o sí. Ya sea por la puesta en escena de los artistas, la producción audiovisual de sus escenarios o por sus asistentes. El domingo, el escenario principal se mantuvo cerrado durante todo el día para preparar el que se había anunciado como ‘el mayor show de la gira’ de Swedish House Mafia. Aunque su actuación empezó más tarde de lo anunciado y acabó antes de lo previsto, no hubo ni un solo asistente que se encontrara en el Arc Stage aquella noche que no se quedara boquiabierto durante el primer drop de ‘Antidote‘. Unas llamaradas que superaban con creces la altura del mainstage inundaron de fuego todo el escenario durante unos instantes. Los asistentes allí presentes no dábamos crédito a lo que estábamos viviendo.
Dinero en metálico. Este festival no cuenta con su propia moneda ni con pulseras recargables. Si vas a comer, beber o comprar merchandising dentro, tendrás que hacerlo en metálico. Dentro hay un par de cajeros automáticos, pero como desconocemos la comisión que cobran, te recomendamos que lleves las libras que hayas sacado para el viaje. Según los precios de los puestos de comida, comer o cenar puede costarte alrededor de 10£, dependiendo de tus gustos. Algo para picar entre horas cuesta entre 3 y 5£.
Hospedaje. Para vivir la experiencia al completo te aconsejamos que compres la entrada que incluye el camping. De esta forma, podrás disfrutar de 4 días de música y fiesta. Si por el contrario, y como nosotros, decides hospedarte fuera del festival, tendrás que elegir entre las ciudades de Manchester, Liverpool, Warrington o Runcorn. Desde allí, puedes comprar una lanzadera que te llevará directamente al recinto del festival, o puedes coger un tren hasta Warrington, que se encuentra muy próxima al festival, y luego un taxi. Nosotros lo hicimos desde Manchester, y aunque la parezca muy complicado, el trayecto en total no supera la hora de viaje y sale por la mitad de precio que la lanzadera. Para volver, al finalizar el evento, deberás acudir a las taquillas situadas fuera del recinto para comprar el ticket. Recuerda que una vez salgas de este, no podrás volver a entrar. Estos billetes no se pueden comprar con antelación y las colas suelen ser largas dependiendo de la ciudad en la que te alojes.
Piérdete. Creamfields te brinda la oportunidad de ver a DJ que rara vez se dejan ver cerca de España. Explora todos los escenarios y déjate llevar, sal de tu zona de confort y descubre a nuevos artistas y nuevos sonidos. En mi caso, nunca había visto a Rezz en directo. Apenas conocía sus canciones puesto que nunca me había llamado la atención el tipo de música que produce, pero sabía que su puesta en escena era increíble y decidí ir a verla. Era consciente de que pocas veces se me iba a presentar la oportunidad de presenciar sus visuales en directo y la aproveché. Sin duda, fue una de mis actuaciones favoritas de todo el fin de semana, incluso superando algunas de mis artistas favoritos. La canadiense supo aprovechar al máximo las 3 pantallas que componían su escenario, donde plasmó sus visuales que, acompañadas de su música, crearon un espectáculo audiovisual que te atrapaba canción a canción.
¿Has ido alguna vez a Creamfields? Cuéntanos en un comentario en nuestras redes sociales tu experiencia personal. ¿Tienes más dudas? ¡Pregúntanos!