¿Es realmente la industria de la electrónica machista o simplemente hay menos interés entre las mujeres por la escena?
El papel de la mujer en la escena es un tema tan recurrente como delicado.
Dejamos a un lado los problemas derivados del abuso de poder y el acoso sexual en cualquiera de sus formas, que muchas mujeres, y por supuesto muchas DJ han tenido que soportar en su carrera. No lo hacemos porque no merezca nuestra atención o por no ser relevante. Muy al contrario, siempre lo condenaremos pero, al ser una cuestión de tanto calado e importancia, es mejor abordarlo en otra ocasión con la atención y delicadeza que requiere.
Centrando por tanto el tema, y si atendemos a que al menos el 80% de los artistas son de género masculino, ¿es la escena electrónica machista?
A pesar de tenerlo más difícil, muchas mujeres han logrado crecer y abrirse paso en esta industria. En un contexto que presenta múltiples desventajas por las barreras estructurales de género, el empoderamiento femenino ha permitido reforzar sus capacidades, estrategias y protagonismo, tanto en el plano individual como en el colectivo. «A día de hoy, cada vez más DJ femeninas están alcanzando visibilidad y reconocimiento, por lo que pueden desenvolverse tranquilamente en una industria que busca equidad en la música de baile», según Andrea Barragán, periodista y colaboradora en Superguapas.
Entonces, ¿existe algún problema realmente? ¿Las mujeres tienen menos oportunidades o, por el contrario, simplemente hay menos mujeres interesadas en la electrónica?
Simplemente como dato, nuestros seguidores en redes son un 79% hombres. En nuestra redacción somos un 75% hombres, pero hemos llegado a sobrepasar el 80%.
Con estos datos hemos querido recopilar algunas opiniones sobre este tema, de mujeres de la escena, empezando por nuestras compañeras en Beat&Mix:
Laila Climent (Beat&Mix):
«Es innegable que la escena electrónica es machista. Simplemente hay que echar un vistazo a la proporción de mujeres y hombres DJ en cualquier cartel de cualquier festival. Durante muchos años el papel de la mujer dentro de la escena dance se ha limitado a estar bailando semidesnuda sobre una tarima o tras una barra sirviendo copas.
Un chico joven que quiere dedicarse a pinchar música o producir electrónica tiene cientos de referentes. Una chica joven que quiere iniciar su carrera como deejay puede sentirse bastante desalentada tan solo con ver el TOP 100 de la DJMag».
Jessica Lara (Beat&Mix)
«Considero que sí hay machismo en la escena electrónica. Se tiende a minusvalorar el trabajo de las mujeres en las cabinas, porque con la mayoría de mujeres que consiguen algo de éxito en la escena es muy normal escuchar o leer comentarios del tipo “a saber qué ha hecho para estar ahí” o “seguro que tienen un ghostproducer” cuando saca un buen tema, como si una mujer no fuese capaz de producir algo bueno.
Aunque también creo que poco a poco se va normalizando la situación si tenemos en cuenta como están creciendo algunas DJ como Amelie Lens, Charlotte De Witte o Nora En Pure por ejemplo.
Como parte de un público mayoritariamente masculino, nunca me han hecho sentirme incómoda en un club o festival. La mayoría vamos para disfrutar de la música que nos gusta sin importar el género, salvo contadas ocasiones».
Marien Baker (DJ)
El año pasado, nuestra compañera Laila quiso abarcar este mismo problema, por lo que estuvo conversando con una de nuestras DJ de más renombre.
«Mis inicios fueron como los de todo DJ amateur de mi ciudad, donde obtuve mucho apoyo de unos y muy poco de otros. Creo que fue donde más me costó ganarme el “respeto” como artista. Supongo que el haber desempeñado otro tipo de trabajos en el mundo de la noche hacía difícil que resultara creíble mi faceta en la cabina […] El pasado año solo el 14 % de los festivales europeos contaron con mujeres en su cartel […] ¿Dónde están las mujeres? ¿Por qué se nos relega a fiestas tematizadas de DJ femeninas? ¿Por qué en nuestro caso habla antes nuestra imagen que nuestra trayectoria? Son preguntas que me hago, porque sigo viendo ese vacío. […] Aunque hemos logrado reconocimiento y tenemos nuestro hueco en la escena aún queda mucho camino que luchar»
Te aconsejamos leer la carta completa de Marien Baker, aquí.
Marien Novi (DJ)
Con motivo del lanzamiento del EP ‘Without Fear’ junto a Castellano, tuvimos la oportunidad de entrevistar a Marien Novi.
Entre otras cosas, le preguntamos por como veía el papel de la mujer en la industria, y si consideraba que existía machismo en la misma. Esto es lo que nos respondía:
¿Crees que la industria de la electrónica es o ha sido machista?
Ha sido muy machista, pero hoy por hoy, hemos avanzado mucho, cada vez hay más mujeres pinchando y muy buenas.
Creo que ahora mismo estamos en un buen momento para la mujer Dj, quitando el tema de la pandemia, se le respeta y se le reconoce el trabajo igual que a un hombre.
Yo la verdad, que en pocas ocasiones me he sentido discriminada. Alguna vez me he tenido que morder los labios, pero no ha sido la tónica habitual. Lo normal ha sido trabajar con compañeros que me han ayudado.
Puedes leer toda la entrevista aquí.
Nina Kraviz (DJ)
La rusa es sin duda una de las DJ más reconocidas y respetadas de la escena, y afirma lo siguiente:
«La imagen del machismo es generalizada. En este sentido, nuestra escena aún necesita muchas mejoras […] Sin embargo, estamos viviendo una época de corrección política en los medios y hay cosas que la gente corriente ya no puede manifestar públicamente. Pero eso no significa que ya no piense así»
Kampire (Dj)
La DJ ugandesa es uno de los máximos exponentes del extraordinario momento de la electrónica africana:
«Las mujeres estamos haciendo lo nuestro: trabajar duro, traer una nueva perspectiva, formar colectivos… Podemos estar hablando del problema toda la eternidad, pero si quieres ver más mujeres, contrata a más mujeres. Se trata de eso, de contratar. Alguien que esté en una posición de poder que dé espacio a tantas mujeres como a hombres. Así de simple»
Carista (DJ)
La holandesa es algo más optimista, reconociendo avances para las mujeres en la escena. Pero también deja claro que el problema persiste:
«(El de la electrónica) es un mundo muy abierto, por supuesto. Y todavía está dominado por hombres. Pero también soy consciente de que gracias a las redes sociales es más visible para todos que hay algo más que hombres blancos dominando el mundo de los DJ. Para una nueva generación como la mía, gente como Honey Dijon han allanado el camino. Así nos resulta más fácil hacer lo que nos encanta»
Conclusión
Es indudable que la gran mayoría de actoras de la industria siente que la escena es machista y que juegan con desventaja, por lo tanto es innegable que hay un problema que deberíamos abordar entre todos los que formamos parte de ella: medios de comunicación, promotores, DJ y amantes de la electrónica en general. Y yo personalmente me voy a mojar.
Siempre he pensado que hay menos mujeres DJ porque, en general, a las mujeres les gusta menos la electrónica. Evidentemente los números respaldan esta teoría. Sin embargo, me estoy dando cuenta de que el problema no está en la cantidad de mujeres disponibles actualmente para confeccionar un cartel, que evidentemente son muchas menos que hombres, sino que ahora veo un problema de fondo, y está más abajo.
En los propios inicios de la formación de un DJ, si eres mujer tu camino está lleno de obstáculos provocados por ese machismo que, a veces sin darnos cuenta, cualquiera de nosotros ejercemos. Ahora entiendo que quizá no hay más mujeres, porque les resulta muy difícil y desagradable llegar al punto en el que se libran de esa presión, al menos en parte. Sigo pensando que hay menos mujeres interesadas en la electrónica, pero desde luego no en la proporción en la que las mujeres están representadas en la escena. Y eso, sin duda, no es justo y es un grave problema.
Por tanto, poner el foco sobre esta lacra y dar voz a las mujeres que sienten esa desventaja debe ser la obligación de los medios. Por ello, trataremos de ser consecuentes y colaborar en esa normalización dentro de nuestras posibilidades, para una escena justa e igualitaria. Aunque siendo completamente sincero, no sé muy bien por dónde empezar.
Quizá debamos marcarnos el objetivo de la paridad en nuestro medio como una declaración de intenciones.