El festival belga sigue trabajando en su faceta solidaria a través de ‘Love Tomorrow’ y ha inaugurado su primera escuela en Nepal demostrando una vez más que Tomorrowland es algo más
Tomorrowland, concretamente su parte más solidaria donde trabaja en diferentes proyectos en los que ayuda a hacer del mundo un lugar mejor, ha inaugurado la primera escuela. Se sitúa en el poblado de Sekha, Nepal, justo en el corazón del Himalaya. El festival realiza estos trabajos a través de su fundación ‘Love Tomorrow‘ y ha abierto esta escuela Love Tomorrow Music & Arts, donde tanto música como arte jugarán un papel fundamental. La organización belga Cunina, que basa su actividad en el desarrollo independiente, colaboró con ‘Love Tomorrow‘ en este proyecto.
Se trata de una escuela donde los niños aprenderán música, danza, arte y teatro, algo que es una parte muy importante de la cultura de Nepal y que está muy presente en su vida diaria. Esta escuela es un edificio de 413 m2 y que dispone de cuatro aulas muy equipadas, un patio y un escenario donde escenificar este aprendizaje que se llevará a cabo en sus aulas. El encargado de inaugurar dicha escuela fue el Embajador de Love Tomorrow, el dj Lost Frequencies junto a más de 300 niños locales.
El proyecto ‘Love Tomorrow‘ gira sobre cinco pilares fundamentales que son: la responsabilidad, la naturaleza, la innovación, la salud y el respeto. Todo ello para realizar grandes iniciativas que, como decimos, sirven para hacer del mundo un lugar mejor para todos. Cabe destacar el puente que ya encontramos en el festival y que quedó instalado hace unos años en el parque De Schorre y las acciones de reciclaje que se llevan a cabo en Dreamville durante la celebración del festival.
